Para equilibrar la autoestima hacen falta dos pasos esenciales: descubrir y actuar
No nos importa tanto la causa de cómo nos encontramos en la actualidad respecto a la autoestima, sino cuál de las dos partes está más dañada o no ha podido crecer lo necesario:
- Autoconfianza
- Sentirte merecedora
En realidad, una vez hemos descubierto cuál de estas dos partes hay que trabajar (a veces, puede ser necesario hacerlo con ambas), puedes dejarlo completamente en mis manos. Te daré el paso a paso a través de actividades especiales. Como siempre digo en estos casos tan bonitos: pasos pequeños para conseguir cosas magníficas y maravillosas.
INSEGURIDAD
Una persona siente inseguridad cuando siempre ha recibido ayuda o las personas de alrededor no expresaron confianza en su independencia. Suele haber algún rasgo de timidez, aunque no siempre es así. La inseguridad es una de las cosas que se trabajan con una increíble rapidez con los pasos precisos que hay que dar.
SÍNDROME DEL IMPOSTOR
No hemos de confundir el síndrome del impostor con la inseguridad del comienzo de cualquier acción novedosa en nuestro elenco de actividades. Con síndrome del impostor nos referimos a cuando, aun habiendo repetido una acción, aun escuchando a otras personas decirnos que lo hacemos genial, siempre tenemos miedo de no estar preparadas, de hacerlo mal, de no ser suficientes. La base es el miedo al fracaso o el miedo al rechazo, la inercia de búsqueda de perfeccionismo o una mezcla de dichos factores.
AUTO-DESCONEXIÓN
Nos referimos con auto-desconexión a momentos en la vida en los que nos hemos ido alejando de quien una vez fuimos (cambios corporales, comparaciones constantes, maltrato psicológico, etc.) o incluso de los casos en los que no hemos conectado nunca con nuestro verdadero yo (donde se dan típicamente frases del estilo: “Siento que necesito un tipo de hombre a mi lado que me hace daño pero no sé por qué”, “No soy lo bella que en realidad siento que debería haber sido” o “Nunca estaré a la altura”).
¿Hablamos?
(+34) 722 133 000
Te ofrezco tres partes indispensables independientemente de la parte de autoestima a trabajar o equilibrar:
1.- La escucha profunda y plena que para poder entender con exactitud cuál de las dos alas está dañada (autoconfianza o sentirte merecedora). Permíteme estar al mil por cien para ti, para entenderte, para ponerme en tu lugar y observar desde tu perspectiva y visión únicas. Así podré personalizar cada uno de los pasos que vas a dar para conseguirlo en muy poquito tiempo.
2.- Poner toda mi sabiduría a tu alcance. No solo te daré el paso a paso para que consigas un equilibrio precioso en tu autoestima, sino que además te ayudaré a entender qué sucedió para que no estuviera en su correcto nivel; así sabrás y entenderás en profundidad para que, si en el futuro sientes algún cambio debido a algún factor ajeno o externo, puedas volver a equilibrarla por ti misma.
3.- Crearemos un Plan de Acción para conseguirlo en el menor tiempo posible y un paso a paso claro y nítido.